Neurología
saradomingo
Jue, 12/06/2025 - 08:00
Neurociencia
La meta de Beatriz Rico (Madrid, 1970) es "entender el cableado de nuestro cerebro". La catedrática de Neurobiología del Desarrollo dirige su propio laboratorio en el MRC Centre for Neurodevelopmental Disorders en el King's College de Londres y ha recibido cuatro millones de libras para investigar los mecanismos a través de los cuales se desarrolla la conectividad interneuronal en el cerebro humano para su proyecto Desarrollo de circuitos inhibitorios en la corteza cerebral humana.
"Se trata de una Wellcome Discovery Award que nos va a permitir reclutar al personal necesario durante los próximos ocho años". Este organismo británico dota de recursos a investigaciones audaces y creativas para lograr cambios significativos en la comprensión de la vida humana, la salud y el bienestar.
Esa es solo una de las metas que tiene su equipo. "Mi laboratorio está enfocado en tres preguntas principales: conocer cómo se conectan las neuronas durante el desarrollo, por qué aprendemos mejor cuando somos pequeños y qué pasa cuando hay problemas durante el desarrollo cerebral y aparecen alteraciones". Pero antes de cumplir los 10 años, ya había dejado por escrito que iba a dejar huella en la Ciencia: "Quiero ser científica y voy a curar algo".
"Buscamos conocer el papel de las neuronas que hacen de directoras de orquesta de las demás en"
Todo un desafío para esta estudiante de Biología de la Universidad Complutense que se topó durante la carrera con la neurociencia de la mano de Maite Solas y Benjamín Fernández, con los que se inició en el estudio del sistema nervioso. Y aquella casualidad se convirtió en un punto de no retorno. "Empecé a centrarme en ello. Y de ahí a la tesis en la Autónoma de Madrid".
"Quería saberlo todo del cerebro, quizás es el último órgano en el que piensa un estudiante". Su curiosidad y la saciedad por encontrar respuestas siempre han estado ahí. Para ello se acercó bien pequeña a los recursos científicos a su alcance: "Tuve un microscopio, un Quimicefa... Tuve claro que me iba a dedicar a la ciencia".
Estos días visita Madrid para intervenir en las Jornadas Neurocientíficas y Educativas de la Fundación Querer. Su ponencia Cómo se conectan las neuronas y qué ocurre cuando sus conexiones fallan, va a poner de relieve los trabajos y las investigaciones actuales sobre el cerebro. "Tenemos proyectos muy interesantes en el laboratorio que avanzan a buen ritmo", subraya.
Rico desprende entusiasmo y pasión por su trabajo, aunque haya una pantalla de por medio en la conversación. "Busco responder preguntas, es mi forma de trabajar y la de cualquier científico. A veces tardamos más o menos en dar con la respuesta completa. La ciencia requiere tiempo y es complicado de transmitir".

Beatriz Rico, en su laboratorio. Foto: JO MIESZKOWSKI/KC CDN
No duda en dejar un mensaje para la clase política que no apuesta por la ciencia porque las maneras de los científicos nada tienen que ver con las de ellos: "La política no ha apoyado a la Ciencia como se merece, da igual del signo que sea. A veces los políticos no entienden que los descubrimientos transformadores en ciencia requieren inversiones a largo plazo. Un buen ejemplo es el desarrollo de las vacunas contra la covid: cómo muchos años de inversión en biología fundamental nos prepararon para producir vacunas eficaces en menos de un año". Con estas premisas, tiene clara cómo debe ser la Ciencia. "La investigación que hoy hacemos tiene que servir a otros. Ellos pueden basar sus avances en ella y si no es sólida ni rigurosa, estará mal y no podrá usarse en los siguientes pasos".
Una científica de la mano de grandes profesores
Junto a Carmen Cavada, catedrática de Anatomía y Embriología de la Universidad Autónoma de Madrid, aprendió a "hacer buena ciencia". De ella adquirió ese perfeccionismo que persiguen los investigadores, "me enseñó que los detalles son importantes y eso se traduce en rigor". Rico presume, sin querer, de haberse formado también junto al biólogo Ardem Patapoutian, uno de los últimos distinguidos con el Premio Nobel de Medicina. "Tuve la suerte de aprender biología molecular de su mano. Fue una aportación magnífica desde el punto de vista conceptual y técnico".
Ambos coincidieron en el Laboratorio de Neurociencia de Louis Reichardt. "Fue durante mi post doc en la Universidad de California en San Francisco". Allí permaneció unos cinco años y, además de profundizar aún más en la neurobiología, se llevó una lección que hoy tiene muy presente: "No hay nada que no pueda hacer".
"Entender los detalles del proceso cerebral es una necesidad médica: un cableado anómalo estaría detrás de graves trastornos neuropsiquiátricos"
Louis Reichardt fue el primer americano en escalar el Everest sin una botella de oxígeno, solo con sus pulmones. "Cuando llegué me propuso hacer un proyecto con total libertad. Era muy generoso en cuanto a la disposición de los recursos y, al tiempo, era exigente con el trabajo". Rico no se vio preparada para asumir el desarrollo de la propuesta. "No tenía la experiencia, pero una persona de su equipo me dejó claro que ésa no podía ser mi respuesta: 'Tú no puedes decir a una persona que sube un K2 a pulmón que no puedes algo, solo decirle que no estás interesada, porque eso sí lo va a entender'".
Desde entonces, Rico combina la curiosidad de su infancia, la rigurosidad de Cavada y la perseverancia de Reichardt en sus proyectos para desenmarañar los secretos del cableado cerebral. Empezó como investigadora principal en el Instituto de Neurociencias de Alicante y de allí se trasladó a Londres. "A través de nuestra investigación, pretendemos comprender mejor cómo se construyen los circuitos corticales, cómo responden a la actividad y qué ocurre cuando estos circuitos fallan durante los periodos de desarrollo. Entender los detalles de estos procesos es también una necesidad para la medicina, ya que un cableado anómalo estaría detrás de graves trastornos neuropsiquiátricos, como el autismo y la esquizofrenia", resume.
Un Plan del Cerebro para frenar los trastornos cerebrales que afectan al 43% de la población, Un innovador estudio en ratones muestra cómo aprende nuestro cerebro, Trazan el mapa más detallado de las conexiones entre células cerebrales de ratones
Descubrimientos clavePublicaciones en Nature y Science han recogido los artículos que han apuntado descubrimientos claves de sus investigaciones. Fue
Dirige su propio laboratorio en el King's College de Londres donde desentraña los misterios del cerebro: "Si sabemos cómo funciona, podremos arreglarlo".
Off
Pilar Pérez
Off